Desde QUIADSA continuamos trabajando en mejorar nuestro Plan de Sostenibilidad, es por ello que hemos calculado la Huella de Carbono tanto de Organización como de nuestro producto estrella, el TURBO.

La Huella de Carbono es un indicador medioambiental que refleja la cantidad de gases de efecto invernadero que se emiten directa o indirectamente en el desarrollo de la actividad de estudio, bien sea la actividad necesaria para la fabricación de un producto, para la prestación de un servicio, o para el funcionamiento de una organización. Por tanto, existen diferentes enfoques a la hora de calcular la huella de carbono.

Los gases de efecto invernadero GEI, según el protocolo de Kioto, son: el dióxido de carbono (CO2), el metano (CH4), el óxido de nitrógeno (N2O), los hidrofluorocarbonos (HFCs), los perfluorocarbonos (PFCs), el hexafluoruro de azufre (SF6), el trifluoruro de nitrógeno (NF3). Sin embargo dado que el CO2 es el GEI que influye en mayor medida al calentamiento del planeta, las emisiones de GEI se expresan en función de este gas, por tanto, se utilizan las toneladas de CO2eq para expresar los resultados obtenidos en el cálculo de huella de carbono.

De una manera general, para calcular la huella de carbono debemos multiplicar los datos de actividad (establece el grado de la actividad generadora de GEI) por el factor de emisión (parámetro que mide la cantidad de GEI emitidos por cada unidad del parámetro “dato de actividad” que hayamos considerado). Esta calculadora permite estimar de manera sencilla las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas a las actividades de una organización, contemplando tanto las emisiones directas, como las indirectas procedentes del consumo de electricidad.

El cálculo de la huella de carbono derivada de la actividad de nuestra organización no es suficiente para realizar un estudio completo de huella de carbono, sino debemos avanzar en la toma de decisiones e implementar una estrategia de reducción de emisiones de CO2 basada en eficiencia energética, ahorro de materias primas, economía circular, mejoras en el proceso, etc. de tal manera que podamos conseguir mejora de dicha huella.

La Huella de Carbono de Organización recoge todas las emisiones asociadas a la actividad de la misma. Desde QUIADSA hemos reducido las emisiones producidas por nuestra organización en 2021 en un 60% con respecto al año anterior. Aunque hemos aumentado nuestra actividad productiva se están haciendo grandes esfuerzos para reducir y optimizar nuestro consumo eléctrico asegurando un origen más renovable del mismo. Nuestro plan de reducción persigue reducir un 5% las emisiones de nuestra actividad en 2023. Así mismo seguiremos desarrollando e investigando nuevos productos más sostenibles y fomentando la utilización de envases reciclados y ecosostenibles en la mayor medida posible.

La Huella de Carbono de un Producto determinado evalúa el impacto de un producto en el cambio climático a lo largo de todo su ciclo de vida. Esto significa que el análisis no sólo abarca el producto en sí, sino que también tiene en cuenta factores adicionales como la cadena de suministro, la logística, la producción interna, la fase de uso y la eliminación del producto.

Desde QUIADSA hemos calculado la Huella de Carbono del TURBO, esta información permite identificar y mejorar el desempeño ambiental de este producto, ya que los resultados obtenidos identifican las etapas del ciclo de vida que causan las mayores emisiones de GEIs, donde se presentan mayores oportunidades de mejora para reducir las emisiones asociadas a la producción del producto en cuestión.

Este estudio del ciclo de vida se ha definido conforme a la norma UNE-EN 15804:2012+A2:2020: Sostenibilidad en la construcción, Declaraciones ambientales de producto y Reglas de categoría de producto básicas para productos de construcción, estableciendo el alcance de la cuna a la puerta. El resultado por kg de adhesivo fabricado, envasado y distribuido es de 1,44 kg CO2 eq.

Siguiendo nuestro objetivo de mejora continua QUIADSA apuesta por mejorar y perfeccionar su Plan de Sostenibilidad, realizando una gestión responsable de los recursos, optimizando el consumo de energía y agua, aumentando la utilización de fuentes renovables, reduciendo la generación de residuos destinados a vertedero e intentando fomentar la reutilización.